Camarerooooo, una de playita a la de ya! Que si chavales, que aquí me tenéis otra vez liada con las maletas porque vuelvo a coger un avión dirección "mi querida España". Y esta vez ni feria ni ferio, directa a la playa que me voy.
Parece ser que el problemita que tenía David con su visa también se ha solucionado, así que no tiene que ir a Bahréin a cancelar la que tiene ahora para que le den la nueva, que es la buena, se lo hacen directamente desde aquí, por tanto el viernes llega él a España. Arreglará todo lo que tenga que arreglar y nos reuniremos en El Puerto, que es el paraíso para nosotros, y de allí a Málaga a ver a sus padres. Yo no sé lo que durará nuestra estancia esta vez, pero seguro que la aprovechamos. Aunque ya lo dice el sabio refranero español, lo bueno dura poco.
Y como aquí en este blog, parece que hablo de todo el mundo menos de mis padres, voy a aprovechar para decir que los adoro. Papis! Que ya nos váis a tener allí! Id preparándoos, que nos vamos a poner hasta arriba de cervezas, vinito, atúncito, y todo lo que termine en ito y esté rico. Y sin haberlo preparado, me ha salido un pareado. De momento mañana a celebrar mi santo en la Rosaleda, donde van a caer unos barbos en adobo, que sólo de pensarlo se me están cayendo ya dos lagrimones.
Y hoy os quedáis sin foto porque el cacharro este no funciona bien y no me carga las imágenes.
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