SEGUIMOS A LA ESPERA

Ya sabéis aquella ley de Murphy que dice que si algo puede salir mal, entonces saldrá mal. Pues en todo lo que se refiere a temas burocráticos con la embajada Saudi se cumple al pie de la letra, al menos según nuestra experiencia.

Ya sabéis que llegamos a España para conseguir la working visa de David, pues han pasado 20 días desde que él llegó y aquí seguimos a la espera. En otras circunstancias estaríamos encantados de estar tanto tiempo aquí, disfrutando de la familia, los amigos, ... Pero ocurre que yo estoy deseando de encontrar un trabajo, y hasta que no tenga la iqama, eso no va a pasar. Así que cuanto más se retrasa la visa de David, más se retrasa el que yo consiga la tarjeta de residencia y más se retrasan las posibilidades de encontrar trabajo. Por esto espero que me entendáis cuando escribo que ya empiezo a desesperarme.

Hay otra cosa que también me desespera un poco, y es estar todo el día de arriba a abajo cargando con maletas. Además debo decir que echo de menos mi rutina diaria: piscina, gimnasio, clases de español y charlas con Alna, etc., y lo dejo ya porque pensaréis que me quejo de vicio.

Eso sí, no todo iba a ser malo. Como podréis imaginar estamos intentando disfrutar de nuestra larga estancia al máximo. Hemos hecho ruta por el norte de España, hemos ido al Puerto de Santa María, Ciudad Real, Madrid, fiestas de Almodóvar del Campo,...y sobre todo hemos disfrutado muchísimo de la compañía. Os dejo foto para despedirme de esta entrada, la cual ha sido una entrada bastante "pejiguera".